Hoy descubriremos la ruta de los Reales Sitios, la de los Palacios de la Granja de San Ildefonso y de Riofrío. Se encuentran ambos en el municipio de la provincia de Segovia del Real Sitio de San Ildefonso, perteneciente a la Comunidad Autónoma de Castilla León, con una superficie de 145 Km. cuadrados, está formado por los núcleos de población de La Granja, La Pradera de Navalhorno, Valsaín y el enclave de Riofrío.
Situados a 98 Km. de Madrid, aproximadamente. Rodeados de una bellísima naturaleza, debió de resultar muy fácil la elección de su ubicación.
El Palacio Real de la Granja de San Ildefonso
El palacio se encuentra en la vertiente septentrional de la Sierra del Guadarrama.
Pertenece a Patrimonio Nacional para visitarlo podemos informarnos en este enlace visita/palacio-real-de-la-granja-de-san-ildefonso.
Es accesible para personas con movilidad reducida, pero informaros antes de ir.
Podemos ir en transporte público:
En los Autobuses «Avanza» (línea Madrid-Segovia) , enlace de información avanzabus/linea-madrid-segovia/, y Autobuses «Linecar» (línea Segovia-San Ildefonso), enlace /linecar.es/–
En tren en el AVE Madrid- Segovia, o la linea regional Madrid-Segovia. Enlace de información Renfe
Orígenes
Los reyes de Castilla cazaban en las inmediaciones del pueblo de Valsaín, donde se construyó un refugio para los monteros, llamado la Casa del Bosque. Y el rey castellano Enrique IV, mandó edificar una ermita dedicada a San Ildefonso.
Los Reyes Católicos donaron el refugio y la ermita a los monjes Jerónimos del Monasterio del Parral en Segovia, convirtiéndolo en un lugar de meditación.
Volvió a ser nuestro rey Felipe II, quien transformó todo en un palacio, – como dijimos en nuestro artículo «Aranjuez y el amor», este rey creó un sistema de Reales Sitios entorno a Madrid, capital de España-, el palacio fue destruído por un incendio en el año 1682.
Historia del Palacio Real de la Granja de San Ildefonso
El primer rey Borbón Felipe V llegó a España en el año 1700. Como los reyes anteriores de España, le gustaba ir a cazar por las inmediaciones del pueblo de Valsaín.
Este rey, críado en Versalles, se enamoró del paisaje, y decidió construir un palacio muy barroco con jardines y fuentes a imagen y semejanza del palacio francés, para retirarse a vivir en él tras su abdicación.
La construcción del palacio comenzó en el año 1721 y se encargó al arquitecto Teodoro Ardemans, finalizándose las obras en el año 1732 por el arquitecto Andrea Procaccini. Intervinieron también los arquitectos Filippo Juvarra y Juan Bautista Sachetti.
El interior del palacio se decoró con mucha suntuosidad, destacándose la Casa de Damas (hoy alberga una fabulosa colección de tapices flamencos), la Galería de las Estatuas (con estatuas de distintas épocas y autores de renombre), el Salón del Trono y la Sala Japonesa.
El rey Felipe V mandó edificar una capilla en la parte exterior del palacio, en la cual, hoy en día, reposan sus restos junto a los de su segunda esposa Isabel de Farnesio, en un precioso mausoléo, que nos recuerda al de los reyes Fernando VI y Bárbara de Braganza, en la parroquia de Madrid de Santa Bárbara, (nos remitimos a nuestro artículo «El Tribunal Supremo. Dos reinas y una historia de amor»).
Tras la muerte del rey Felipe V, el palacio fue la residencia de verano de los sucesivos reyes de España. Siendo testigo de importantes hechos históricos. Ha sido lugar de embajadas y de nacimientos y bautizos de infantes,- como el de Don Juan, abuelo del actual rey de España Felipe VI-.
En 1918 el palacio sufrió un incendio quemándose las pinturas de las bóvedas.
Los jardines del Palacio Real de la Granja de San Ildefonso
Forman parte del conjunto arquitectónico junto con el Palacio, y ocupan una extensión de 146 hectáreas.
El trazado de los jardines es obra del arquitecto francés René Carlier, padre del otro arquitecto francés que trabajó en España en la construcción del Palacio de Las Salesas, François Carlier, (nos remitimos a nuestro artículo «El Tribunal Supremo. Dos reinas y una historia de amor»).
En los jardines nos encontraremos con un laberinto y un grandioso bosque, poseedor de una gran variedad de árboles y plantas de todo tipo.
Las fuentes de la Granja
Se encuentran, como no podía ser de otro modo, distribuídas entre los jardines, presidiendo los espacios principales.
La abundacia de agua procedente de la montaña, fue uno de los atractivos del lugar, pues permitió la construcción de innumerables fuentes, obra de un grupo de escultores franceses (Fermín, Thierry, Dumandrè y Pitué).
Las fuentes se realizaron en plomo, para ser pintadas imitando bronce y mármol.
El sistema hidráulico original se conserva, y sigue en funcionamiento en la actualidad.
Hay un total de 26 fuentes, todas ellas basadas en la mitología clásica, las más importantes son:
- Fuente de la Selva
- La Carrera de Caballos
- La Cascada Nueva
- Fuente de los Vientos
- Fuente de los Dragones
- Fuente de las Ocho Calles
- Fuente del Canastillo
- Fuentos de los Baños de Diana. (Una de las más espectaculares).
- Fuente de las Ranas
- Fuente de la Fama. (Su surtidor lanza el agua a 40 metros de altura)
Si camináis hacía la montaña, llegaréis al lago artificial llamado «El Mar». Su agua procede del deshielo y corona lo alto de los jardines, de este agua se nutren las fuentes.
También os encontrareís con la Casa de la Góndola, la Piscifactoría y la Gruta.
Antes de visitar las fuentes, informaros de su funcionamiento en este enlace .patrimonio nacional fuentes-granja-san-ildefonso , pues su encendido varia mucho a lo largo del año.
En la Granja también podemos visitar la Real Fábrica de Cristales
Se encuentra a unos 500 metros de distancia del Palacio.
Hoy en día alberga la Fundación del Centro Nacional del Vidrio.
Para visitarla os facilitamos este enlace real fabrica de cristales. La visita resulta sumamente curiosa.
Tenemos que destacar que en esta fábrica, se han realizado la mayoría de las lámparas, ventanas, espejos y cristales, que adornan y forman el ajuar de los palacios españoles, desde el año 1727.
La fábrica fue fundada en el citado año, por los maestros vidrieros de las fábricas de Goyeneche y de Nuevo Baztán, por orden del rey Felipe V, para que concluyeran la decoración de su palacio, instalando inicialmente un pequeño horno de vidrios planos. Con el paso del tiempo se han ido consiguiendo nuevas técnicas, como la del colado, los vidrios entrefinos, los vidrios labrados, etc.
Ha sido de gran ayuda la abundancia de combustible disponible en la zona, gracias a los pinares del pueblo de Valsaín y a los robledales próximos, así como, las arenas y las arcillas de los pueblos cercanos de Brieva y La Lastrilla.
En el interior de la Real Fábrica de Cristales se encuentra el Museo Tecnológico del Vidrio
Es un edificio industrial construído por orden del rey Carlos III en el siglo XVIII.
Allí conoceremos la fabricación del vidrio. Y podremos ver exposiciones temporales y permanentes sobre el vidrio a lo largo de la historia, el cristal de La Granja y las famosas vidrieras del Taller de Maumejean, que tanto han decorado los palacios españoles.
El Palacio Real de Riofrío
Se encuentra a tan sólo 11 Km. del Palacio Real de La Granja, y próximo a Navas de Riofrío.
Si os apetece visitarlo podéis informaros en este enlace patrimonio nacional palacio-real-de-riofrio. Es de Patrimonio Nacional.
Este Palacio Real, es de los menos conocidos y frecuentados. Os recomendamos ir en coche, moto o autobús.
Está rodeado de una agreste naturaleza, en total 600 hectáreas de bosque de gran variedad, que hay que atravesar, y de una multitud de animales, destacando: corzos, muflones, ciervos y jabalies.
Por algo fue pabellón de caza en los siglos XIII y XIX, y dispone de un magnífico museo de caza.
Es accesible para personas con movilidad reducida, pero informaros antes de ir.
Su historia
El rey Felipe V, utilizaba la finca de Riofrío como coto de caza, se lo alquilaba al Marqués de Paredes.
A la muerte de este rey en el año 1746, su segunda esposa la reina Isabel de Farnesio, se vió relegada de la corte y del Palacio de la Granja, al acceder a la corona su hijastro el rey Fernado VI, con el que no tenía buena relación. Por este motivo, la reina Isabel de Farnesio, que había cogido mucho cariño a la zona, compró los terrenos al Marqués de Paredes para hacerse su propio palacio.
Pero, al subir al trono el rey Carlos III, hijo primogénito de Isabel de Farnesio, ésta volvió a tener un papel destacado en la corte, y ya podía acudir al palacio vecino de La Granja, motivo por lo que no llegó a vivir en su nuevo palacio.
Características
Estaba previsto crear todo un conjunto, con caballerizas, iglesia, teatro, casas de oficios, etc. , el proyecto quedó a medias y nunca llegó a finalizarse.
El Palacio Real de Riofrío siguió las ideas del marqués de Scotti, consejero artístico de Isabel de Farnesio, en cuanto a la simetría de todo el conjunto. El exterior es rosa, el patio de granito, y de piedra caliza las balaustradas de las escaleras. Posee lineas sencillas y elegantes, con un marcado estilo italiano, al igual que su reina.
Estuvo sin habitar mucho tiempo, hasta que el esposo de la reina española Isabel II, Francisco de Asís de Borbón, fijó aquí su residencia. Durante esa época se decoraron algunos salones y el comedor, y se instaló un original sistema de llamadores para la servidumbre.
Posee una extensa colección de pintura.
Posteriormente, el hijo de éstos, el rey Alfonso XII, se instaló en el palacio de Riofrío cuando quedó viudo de su primera esposa, la reina María de las Mercedes.
Actualmente, sólo se utiliza para visitas turísticas. Ya nadie caza en sus inmediaciones.
Bien, ya sólo me queda despedirme, y haber conseguido que os pique la curiosidad.
Cuando vayáis a la Granja, no dejéis de comer sus famosos judiones.
Hacer turismo, de cualquier forma, alimenta el alma.
Hasta pronto.
Rych
La verdad, es que resulta muy ilustrativo. Merece la pena leerlo
Buenas noches.
Muchas gracias por el comentario, fiel lector.
Un saludo